Veo a dos mujeres como dan de comer a unas palomas, en un alocado jolgorio despliegan sus alas en un vuelo perfecto, instante que inmortalicé con mi cámara y que ahora comparto.
A veces en pensiones y hostales de mala muerte el viajero descansa, no importa el lujo, solo un camastro en el que recuperar fuerzas y continuar el camino.
Hemos vivido mil peligros allende los mares bajo tenebrosos cielos luchamos batallas fieras nos libramos de los encantos de las sirenas; siempre juntos con grandes penas y sufrimientos conseguimos burlar al Hades y a Tanatos.
Ahora ya pasado el tiempo con la misión cumplida dejamos el puerto el viento favorable nos lleva de regreso a casa las estrellas en el cielo nos muestran el camino hoy iniciamos el regreso ¡Volvemos a Itaca!