Viajar es irse, fugarse, moverse siempre hacia adelante y de vez en cuando regresar para de nuevo volver a partir

martes, 17 de diciembre de 2013

El niño y el mar


Voy al encuentro del mar
con la mente receptiva de un niño.
El mar... La luz... La paz...

Busco el sosiego
y la música azul marino
que se escucha cuando
el viento te acaricia la piel:
Con el rumor de las olas
me duermo, en ellas
acuno mis sueños eternos
de enhebrar bellas palabras
con las que decirte cuanto te amo,
lo que por ti siento.


la Luz se aleja por el horizonte
sentado espero a la noche:
la cúpula cuajada de estrellas
 custodia mis profundos sueños.
Cuando amanece 
un sol radiante
calienta mi piel;
aguardo en la orilla
en profundo silencio.

Busco incensaste la paz...
Aunque en realidad solo
es a ti a quien busco para
abrazarte eternamente;
como aquella noche
bajo la luz pálida
de la luna de Islamabad:
Sentí el calor de tu cuerpo,
delicado, intenso, eterno...
Si, así fue como entre tus brazos
se paró el tiempo
y todo cambió... ¡Todo!
...Nuestras vidas,
nuestro común destino,
y tal vez el destino del universo.